Dejar de mentir: síntomas, causas y tratamiento de la mitomanía
Quien más o quien menos miente de vez en cuando. Mentimos para resultar personas interesantes, competentes e incluso atractivas. Sabías que, la primera vez que conocemos a alguien, y particularmente si esa persona nos resulta agradable o nos atrae, decimos entre dos y tres mentiras, quizás no muy importantes, pero que añaden algún matiz que tiene por finalidad llamar la atención de esa persona. Pero no todas o todos mentimos igual, hay quien miente de manera compulsiva. Personas a las que las mentiras se le escapan por la boca y no pueden evitarlo. En muchos de estos casos nos encontramos ante un trastorno psicológico conocido como mitomanía.
Usualmente, quien padece de mitomanía miente con la finalidad de obtener admiración, evitar un castigo, justificar un incumplimiento,obtener réditos personales en base al engaño, o, sencillamente porque no lo puede evitar.. Si has visto la película "Mentiroso compulsivo" protagonizada por Jim Carrey, que interpreta a un abogado que miente en casi cada frase que dice, te puedes hacer, a través de esta caricatura, una idea bastante aproximada a lo que es un mitómano. No obstante te defino a continuación este problemático constructo.
¿Qué es la mitomanía?
Se trata de un trastorno psicológico importante, disruptivo, que hay que tomarse muy en serio. Conocida también como pseudología fantástica o mentira patológica, ola mitomanía consiste en la práctica de una conducta repetitiva del acto de mentir. Es, por consiguiente, una conducta adictiva. La persona mitómana no miente puntualmente, como pueden hacerlo otras personas en un momento dado para evitar una discusión o para no hacer daño. Quien padece de mitomanía suele acabar mintiendo porque sí. Se convierten en expertos en mentir y acaban por hacerlo con una naturalidad pasmosa. El embuste se convierte en una forma de vida. Por lo tanto, el significado de mitómano engloba la mentira como una parte de la personalidad del individuo.
La mitomanía es un trastorno psicológico facticio, es decir, desarrollado en torno a una conciencia de lo artificial, de lo falso, de lo ficticio. El objetivo principal de la persona mentirosa es simplemente hacer que su realidad sea más llamativa o mejor de lo que es en la realidad. No es extraño encontrar rasgos narcisistas en la mitomanía, ya que es muy habitual que la persona que miente mucho y de manera completamente arbitraria busque la finalidad de quedar por encima de los demás.
¿El mitómano se cree su propia mentira?
No siempre. La mitomanía, como casi cualquier otro trastorno psicológico, tiene niveles o grados de gravedad. La mayoría de las personas que mienten compulsivamente saben en todo momento que están mintiendo, es consciente de que está narrando una realidad paralela falsa o falseada y, además se siente a gusto expresándose a través de las mentiras. Es en este sentido donde consideramos que la mentira puede pasar a ser un recuerdo "real". En los casos más graves de mitomanía puede aparecer el fenómeno de pseudología fantástica de los propios recuerdos. Este situación conlleva la formación de una historia de vida construida con muchas mentiras, que lo alejan de la verdad y generan un personaje ficticio.
¿Qué causa la mitomanía?
Este tipo de trastorno mentiroso compulsivo surge como una imposibilidad para aceptar la realidad, de manera que construye ese personaje que le hace sentir mejor. Buscan recibir más atención y admiración, pero, también, reducir la ansiedad frente a aspectos desagradables de su vida. Teniendo esto en cuenta, podemos indicar como causas principales de la mitomanía las siguientes.
- Desequilibrio a nivel neurológico. Estudios de neuroimagen han revelado en personas mitómanas un incremento de materia blanca del cerebro y una disfunción hemitalámica derecha.
- Anomalías del sistema nervioso. Como la presencia de epilepsia, traumatismo cranoencefálico o infecciones.
- Factores psicológicos. Como la baja autoestima, la falta de habilidades sociales, la inseguridad y dificultades para aceptar la realidad. También los traumas psicológicos como consecuencias de abusos físicos y sexuales.
- Factores biológicos. Neurotransmisores como la serotonina o la dopamina podrían actuar como detonantes de la mitomanía. Es decir, experimentan una sensación de riesgo que hace que se segregue más cantidad de esta sustancia y les haga sentirse bien.
- Enfermedades mental. Como los trastornos psicóticos, esquizofrenias o trastorno bipolar,
Cómo tratar con una persona mitómana.
- Aborda el problema. La mejora manera de acabar con la influencia negativa de una persona mentirosa patológica es hacérselo saber y mostrarles la necesidad de corregir la conducta mitómana.
- Aléjate. Es frecuente que no podamos ayudar a alguien que nos miente compulsivamente, ni que ésta persona quiera seguir terapia porque (otra mentira) considera que no tiene ningún problema. En estos caso, es mejora alejarse de la persona mentirosa e intentar evitarla para no salir perjudicados.
- Mantén la calma. Con frecuencia un mitómano con sus mentiras puede dejarte en evidencia o hacerte pasar vergüenza; en estos casos es vital mantener la calma e intentar explicar tu posición al respecto, y alejarte.
Cómo dejar de mentir.
- Identificar las razones por las cuales se miente y trabajar en solucionarlas.
- Establecer objetivos razonables y reales por los cuales tengas motivación para abordar el impulso de mentir.
- Considerar la honestidad como un valor parta tu vida diaria, y actuar en consecuencia.
- Buscar ayuda profesional que te permita iniciar un camino terapéutico para solucionar esta patología psicológica.
Psicoterapia para la mitomanía.
PU
Comentarios
Publicar un comentario